Las posibles aplicaciones de este sistema

...ahora mismo ustedes ya se percatan que hay un algo más presente en el cúmulo de conocimientos con que cuentan. Y aunque buena parte de lo que ahora saben es totalmente nuevo y hasta contrario a lo que antes de estas conferencias sabían, lo realmente nuevo es la manera de relacionar lo que saben y sabían, con las vivencias que tienen y tenían. Esto tiene la ventaja de que cada uno puede elegir la dirección en la que quiere seguir investigando, o, como suelo decir, buscando.

Apoyándonos en este sistema podemos indagar en algunas direcciones, como por ejemplo:
1. El proyecto y el diseño arquitectónicos, con todo lo relacionado al espacio.
2. El estudio de la imagen urbana, con todo lo relacionado al lenguaje.
3. La crítica de arquitectura, al concebir las posibilidades de orden en un momento dado, etc.

Conferencia 10. El proceso creativo del arquitecto: Teoría y Sistema

El espacio arquitectónico no existe

Cuando decimos de un objeto que tiene cierta cualidad es porque tenemos información previa que sustenta nuestro comentario. Si esto es así, entonces para calificar un espacio como arquitectónico primero debemos definir qué es el espacio y qué es lo arquitectónico. Caeremos en la cuenta que si bien estamos de acuerdo, con las debidas reservas, de lo que es el espacio es, lo arquitectónico depende de la particular definición de arquitectura que cada uno de nosotros tiene. O bien, que para calificar un espacio como arquitectónico debemos estar de acuerdo en lo que la arquitectura es. Y como hay tantas definiciones de arquitectura como personas en este auditorio, no es posible definir el concepto 'espacio arquitectónico', a menos de arriesgar la integridad intentando convencer a otros de tus definiciones previas.

Sin embargo, aunque afirmo que el espacio arquitectónico no existe, por lo ya expuesto, ahora mismo arriesgaré mi integridad...

Conferencia 2. El proceso creativo del arquitecto: Teoría y Sistema

Las claves del lenguaje de los edificios

Desde el punto de vista de este sistema la semiótica puede muy bien desecharse. Si el medio de expresión es el lenguaje (en este caso, el de la arquitectura), ¿por qué se tiene que aprender otro lenguaje (el de la semiótica) para explicar al primero?

La solución está en, por un lado, distinguir cuáles son los tipos de percepción del individuo para saber qué es lo que percibe cuando está ante un edificio y, por otro, en qué grados percibe lo que tiene ante sí.

Mientras la semiótica y sus seguidores sigan complicándose la vida, nosotros podemos leer lo que el Partenón o la casa de la esquina tienen que decirnos.

Conferencia 4, El proceso creativo del arquitecto: Teoría y Sistema